El aceite es más fácil de manejar para drenar, limpiar, y rellenar los cojinetes o cajas de engranes.
El aceite es más conveniente para variaciones de temperatura y velocidad.
El aceite se puede utilizar en un sistema circulante para actuar como a un agente refrigerante y para quitar las impurezas.
El aceite se puede utilizar en un sistema del flujo de gravedad para lubricar varios cojinetes en una sola locación.
La grasa permanecerá en un cojinete con menos fugas que el aceite, y los sellos pueden ser bastante sencillos.
Con una pistola engrasadora, la grasa se puede forzar a fluir en cualquier dirección, pero el aceite hace sólo flujo hacia abajo a menos que se instale un sistema de bombeo a presión.
En condiciones de operación cerca a una falla de lubricación, la grasa es mejor que el aceite de la misma viscosidad como el aceite mezclado, debido a la lubricación extra proporcionada por el jabón.
Bajo muchas condiciones de trabajo la grasa llevará una carga más pesada que el aceite del cual se compone, ya que los jabones imparten habilidad superior de lubricación.
Las grasas son a menudo más versátiles que los aceites, y menos grados se requieren para condiciones diferentes de velocidad y carga
Consejo extraído del libro Reparación de Maquinaria Industrial por Ricky Smith y R. Keith Mobley
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